EL ÁRBOL DE LA NOCHE TRISTE
Entre muchos monumentos que recuerdan acontecimientos de la historia mexicana, en la Cd. de México está un ahuehuete o más bien dicho, los restos del viejo ahuehete donde se dice que se sentó a llorar Hernán Cortés, mientras esperaba a sus compañeros que huían de la gran Tenochtitlan.
La historia basada en el testimonio de Bernal Díaz del Castillo desde el arribo de los soldados españoles a la capital azteca, dice que al llegar a ella, fueron bien recibidos por Moctezuma II y hospedados en el Palacio de Axayácatl, padre de Moctezuma, en él descubrieron una puerta clausurada que abrieron para descubrir que había otra habitación repleta de objetos valiosos, oro y piedras valiosas principalmente.
Como una forma de ganar posición y no estar expuesto con sus soldados a un ataque tomó prisionero a Moctezuma y esto desagradó a la nobleza aztaca, el tlatoani decía que no estaba prisionero sino de visita o algo así pero el descontento iba en aumento, luego Cortés tuvo que ausentarse para enfrentar a Narváez, emisario de Diego de Velázquez que iba a tomarlo preso y esa ausencia fue aprovechada por Pedro de Alvarado para realizar una matanza de nobles aztecas reunidos en una celebración, la carnicería fue también para saquear oro que tenían los asesinados y las cosas ibande mal en peor.
Cuando Cortés volvió y se deshizo de Narváez, se encontró con el pueblo azteca muy inconforme y a punto de iniciar la guerra así que presentó a Moctezuma ante su pueblo para calmarlos pero dice Díaz del Castillo que el gobernante fue apedreado y murió.
Cuitláhuac hermano del difunto tomó el mando de la guerra para expulsar a los invasores ibéricos, Cortés pidió tiempo para hacer naves e irse pero tenía el plan de evacuar la ciudad en la noche sin ser vistos, el 30 de junio de 1520 en la noche recogieron las riquezas de Axayácatl e iniciaron la huida pero fueron descubiertos, atacados y perseguidos, muchos españoles y muchos más aliados tlaxcaltecas murieron, algunos españoles se ahogaron en el lago por querer correr y cargar el oro robado, al llegar a Tacuba el comandante español se detuvo para contar a sus muertos y esperar a los que faltaban, en el árbol famoso derramó lágrimas según Díaz el cronista.
La historia tomó el símbolo y se bautizo al milenario ahuehuete como "El árbol de la noche triste", los historiadores del siglo pasado cuestionaron el nombre y propusieron que si había sido una victoria azteca debería llamarse la noche victoriosa o alegre o algo por el estilo.